Una jornada histórica
Durante la mañana y primeras horas de la tarde de ayer se llevó a cabo la Asamblea Anual Ordinaria destinada a tratar la Memoria y Balance anual de la Institución. Con un marco de asistentes que obligó a dejar de lado la cancha de Pelota Paleta y utilizar el gimnasio de Básquet se trató el primer ejercicio de la gestión de Mauro Morrone y por primera vez en cien años de historia fue rechazado.
Doscientos cuarenta y un socios asistieron para interiorizarse y participar de la Asamblea en un clima que recordaba (no poco) a una instancia fundacional.
Dirigentes cercanos a la Comisión Directiva apalabrando a socios en la esquina de Vicente López; grupitos de la oposición sacando cuentas en pasillos y socios que aún a las puertas de la Asamblea decían “vine porque quiero saber que está pasando”.
Como en toda actividad que los miembros componentes consideren trascendente, y para reafirmar la misma, debe haber votos que llamen a sorpresa, y este fue el caso del ex Vicepresidente segundo de la gestión Mozo, Rodríguez Segovia, a quien en el Club llaman “el paraguayo”, que luego de ser uno de los blancos predilectos de denostación hacia la gestión anterior, pasó a votar a mano tendida a favor del actual oficialismo.
La jornada pintaba como negativa para el oficialismo y se pudo ver en la primera votación cuando ganó la moción de alterar el orden del día. El motivo fue que los socios que realizaban esta propuesta ignoraban quienes habían firmado los balances integrando la Comisión Fiscalizadora.
Después de un arduo debate la votación favoreció a la oposición y se comenzó por el punto cinco.
Luego de agotados estos debates se discutió la Memoria, lo que terminó en una reñida y cuestionada votación que favoreció por ochenta a setenta y nueve al oficialismo en medio de una rechifla generalizada que llevó al polémico representante (ver aparte) de Personas Jurídicas a establecer votación nominal para el Balance.
Luego de un fuerte debate en el que lamentablemente no se debatieron temas de fondo, sino de forma, finalmente la extenuante votación nominal dio un resultado de noventa y cinco votos por la negativa contra setenta y tres de la afirmativa del oficialismo (algo que jamás en los cien años del Club había sucedido).
A continuación el Dr. Arias, abogado de la Asociación del Fútbol Argentino, explicó a los asistentes los alcances de la sesión de tierras a firmar en los próximos días por los cuales el Club Atlético Temperley será tenedor (se estima que por cincuenta años) de las tierras de Finky.
Este proceso, siempre según las palabras del abogado de AFA, se dividirá en dos partes. En la primera pasarán al Club los terrenos que actualmente tiene el colegio Belgrano (incluida la cancha por la que nuestro hockey paga un alto alquiler) y en una segunda sesión las tierras que actualmente tiene la municipalidad.
Esta decisión, señaló el letrado, se basa en que nunca hubo un pedido oficial por parte del colegio privado ni del municipio sobre las tierras, cosa que si ocurrió con el Club.
Apostillas
Libertad
Destacable la libertad que tuvo la prensa para trabajar durante la Asamblea. En ningún momento su accionar fue restringido y se pudo grabar; filmar y sacar fotos con absoluta comodidad.
Un progreso significativo que hay que saludar respecto a Asambleas anteriores.
Parcial
Este fue el adjetivo más cordial que recibió el veedor de Personas Jurídicas, Cr. Hugo Maidán. El funcionario pareció por momentos el más ferviente defensor del oficialismo (siempre es así, son oficialistas por naturaleza, deslizó un asambleísta). No solo se manejó de manera autoritaria en numerosos pasajes de la Asamblea sino que tampoco permitió un debate fluido. Desde la oposición se le imputó un recuento falaz en la votación de la Memoria (“¿votamos los mismos por la negativa y ganó el oficialismo por un voto?” le recriminaban).
Extraño
La política es el arte de lo imposible. Después de haber sido criticado duramente por la oposición (hoy oficialismo) durante su gestión (mejor no recordar lo que decían de él) “el paraguayo” Rodríguez Segovia levantó su mano para aprobar la Memoria y gritó su SI! para aprobar el Balance.
Derechos
No fueron pocos las socios que se acercaron al Club solo “para ver” lo que pasaba en la Asamblea. Lamentablemente la suerte fue despareja para ellos. Algunos, los que patalearon y conocían sus derechos, fueron autorizados a ingresar a un sector del gimnasio diferenciado de los socios habilitados a votar; otros en cambio tuvieron que mirarlo “con la ñata contra el vidrio” y muertos de frío desde fuera del mismo.
