¿Y por casa cómo andamos?
Por Santiago Dieser
21/09 - Victorias sobre Flandria y Colegiales; empates con Acassuso, Chicago y San Carlos. Si bien no cayó como local en este campeonato, el balance del Gasolero jugando en el Beranger tiene gusto a poco, y más aún luego del partido que se empató en cero con Villa San Carlos, donde generar juego fue una tarea difícil para el equipo dirigido por Dabrowski.
Al finalizar el encuentro, el tema que sonaba en los pasillos del vestuario celeste era el mismo para todos: al Cele le cuesta ser protagonista en su cancha. A veces por limitaciones propias, en las que los que más saben con el balón no están finos y los delanteros de peso se tienen que retrasar demasiado, haciendo nulas las chances de anotar; muchas otras, por culpa de rivales que vienen a especular con un empate y un solo delantero en el área que defiende Alejandro Medina. Fue el caso de San Carlos, que vino al Beranger con un planteo mezquino que, sumado a algunas ausencias y limitaciones en el Gasolero, hicieron que el partido sea muy chato y que la impaciencia de la gente se haga notar en ciertos pasajes del partido.
El equipo en líneas generales funciona. La defensa estuvo sólida aún sin contar con Damián Gimenez y Lucas Alessandria, experimentados caudillos. El mediocampo no contó con su relojito, Lucas Hure, pero los problemas allí pasan más que nada por la creatividad. Arriba Cobelli es un tanque que está en un gran momento, si a él le sumariamos a Luís López (recuperándose de una grave lesión) estaríamos hablando de la mejor delantera de la divisional. El equipo no está funcionando de local como debería, pero material para hacerlo hay. Sólo hay que corregir algunos aspectos y la casa, seguramente, estará en orden.
